Dice llevar un maletín siempre consigo para que nunca le falte un buen puro, de manera que se provee de una selección para cada momento, porque como él mismo dice, “el puro se escoge en función del tiempo que tengas, las ganas que tengas o de lo que hayas comido previamente”. Además de un número considerable de vitolas, el maletín dispone de los accesorios necesarios para el ritual del encendido como el cortador y un buen encendedor; asegurándose de que los puros tengan una humedad correcta.
Por María Forcada
“No soy esclavo de un vicio, sino dueño de un placer” Mark Twain
Los inicios de un fumador de cigarro puro…
Los recuerdos de mis primeros cigarros puros vienen con el recuerdo de mi padre. Cuando yo tenía 16 años le veía disfrutar fumando, así que yo también empecé a fumar escondido, en su despacho. Tampoco puedo olvidar el mejor puro que he fumado, un Davidoff Diademas, creado para conmemorar el 100° aniversario del nacimiento de Zino Davidoff, y otros momentos maravillosos en lo que siempre hay un puro que queda en la memoria.
Un puro para cada momento…
Siempre hay un puro para cada momento, Por ejemplo, para un momento de estrés resulta perfecto algo ligero, simple; pero si llegas con ganas de fumar siempre tienes algo especial guardado. Uno de los mejores lugares para fumar, en mi opinión, es en el mar, la combustión es ideal y además hay más oxígeno.
Las pistas para reconocer al mejor…
Un buen puro tiene que ver con la fortaleza, el tamaño, la zona de elaboración y la capa, que puede ser más intensa o cremosa. Hay sabores herbáceos y otros más dulzones, así que dependiendo de cómo te sientas, debes elegir un tipo u otro.
Para reconocer un buen puro la hechura debe tener consistencia firme, un gramaje importante y una capa pareja, con venas finas para que no rompan con el encendido. La capa debe ser sedosa y aceitosa, una untuosidad provista por el mismo aceite natural de la hoja. El encendido debe ser uniforme, teniendo cuidado de girarlo cuando fumas para mantener la uniformidad. Por otra parte, es importante recordar que el cigarro es puro tabaco, no hay aditivos, ni filtros.
El fumador mexicano…
El mexicano no suele ser un verdadero fumador de cigarros puros. Le gusta fumar en una boda y ocasiones especiales pero no porta su propia colección de cigarros.
Hay puro más allá de Cuba…
Claro, están República Dominicana y Nicaragua… Pero también hay otras zonas productoras interesantes como Camerún, Estados Unidos, Honduras o Canarias.